Maternidad sentada, 2004
Bronce, pátina negra
Edición 6
46 x 20,3 x 18 cm
FERNANDO BOTERO
Medellín, (Antioquia), Colombia, 1932
Pintor y escultor colombiano reconocido en el mundo entero como uno de los grandes artistas surgidos en la segunda mitad del siglo XX. A los 16 años expone por primera vez sus pinturas al público y a los 19 se traslada a Bogotá. En 1952 viaja a Madrid, donde se matricula en la Academia de San Fernando y trabaja intensamente en el Museo del Prado. Este mismo año recibe el II Premio de Pintura en el IX Salón Anual de Artistas Colombianos. Al año siguiente se dedica a viajar por Italia y a estudiar en Florencia las obras del Renacimiento. En 1955 Botero regresa a Bogotá, luego en 1957, viaja a Nueva York y a Washington, donde tiene una exposición individual en la Unión Panamericana. Ese año recibe la Medalla de Plata en Pintura en el Salón Anual de Artistas Colombianos. En 1958 en el XI Salón Anual de Artistas Colombianos, recibe el Primer Premio de Pintura y participa en la Bienal de Venecia, seguidamente de su intervención en la Bienal de Sao Paulo en 1959.
En 1960 se radica en Nueva York hasta 1973. Hacia 1965 abandona la pincelada visible por una factura lisa y pulida que a partir de ese momento caracterizará su pintura. En esos años vive entre Nueva York, París y Bogotá hasta radicarse en París en 1973. Realiza entonces sus primeras esculturas, que muestra en el Museo de Arte Contemporáneo de Caracas en 1976 y en la Fiac de 1977. Ese año dona dieciséis obras al Museo de Antioquia en Medellín. En 1979 tiene una retrospectiva en el Hirshhorn Museum and Sculpture Garden, Washington. En los años ochenta las escenas taurinas son el tema privilegiado de su pintura. En 1980 abre un estudio en Pietrasanta en la Toscana, Italia y se dedica cada vez más a la escultura. El Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía, Madrid, presenta en 1987 una retrospectiva de su obra. Luego en la década del noventa realiza intervenciones en espacios urbanos: en 1992 realiza una instalación de sus esculturas en los Campos Eliseos, París; en Park Avenue, Nueva York, en el Mall de Washington, en los jardines del Museo Nacional de Bellas Artes de Buenos Aires, en el Paseo de Recoletos, Madrid, en la Plaza del Comercio de Lisboa, en la Plaza de la Signoria de Florencia. En el 2000 dona al Museo de Antioquia, Medellín, ochenta y cinco obras de su autoría y veintiún de su colección, y a la Biblioteca Luis Ángel Arango de Bogotá, ciento treinta y seis obras de su autoría y cincuenta y dos de su colección. A partir del 2000, pasa largas temporadas en Pietrasanta y en Medellín, trabajando en escultura.
Tanto en la obra pictórica como escultórica de Botero, en particular sus obras monumentales, han dado la vuelta al mundo, despertando la admiración y el entusiasmo de quienes entran en contacto con ellas. En la actualidad Botero reparte su actividad y su trabajo entre París, Nueva York y Pietrasanta. Está representado en numerosas colecciones y espacios públicos en el mundo.